¿Quién es Job y porqué se le llama el Santo de la Paciencia?

El santo Job es un conocido personaje bíblico famoso por su enorme paciencia y fe en Dios, la que nunca perdió a pesar de perder todo lo que tenía.
Nació en la región de Hus, al sudeste de Palestina. Era pudiente, respetado por sus vecinos, contaba con una cantidad inmensa de ganado y tenía 10 hijos: siete varones y tres mujeres.
Job es sometido a duras pruebas por Satán, con permiso de Dios, para demostrar su fe inconmensurable y su plena confianza en Dios.
Un día, un mensajero le informó que sus ladrones habían matado a sus trabajadores y robado sus bueyes, después, otro mensajero le contó que un rayo mató a sus ovejas y pastores y otro más le informó que enemigos del país vecino habían matado a sus arrieros y robado sus camellos y como si esto fuera poco, sus diez hijos murieron cuando el techo de la casa se derrumbó sobre ellos.
Sin embargo, a pesar de estas desgracias, Job no culpó a Dios en ningún momento. En lugar de eso, se rapó la cabeza en señal de duelo y dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre. Sin nada volveré al sepulcro. Dios me lo dio, Dios me lo quitó. Bendito sea Dios»
Job también padeció una terrible enfermedad cutánea, pero tampoco culpó a Dios, hasta que un día tres amigos culparon al mismo Job por lo que le estaba pasando.
Fue entonces cuando Job dirigió su oración a Dios pensando que no merecía un sufrimiento tan grande. Pero se da cuenta de su error y retira sus palabras y pide perdón a Dios.
Después de pasar por todas estas situaciones y de ver que su fe superó toda prueba, Dios bendijo de nuevo a Job, le devolvió su salud, sus riquezas y lo curo de su enfermedad.
Además, llegó a vivir hasta los 140 años, construyó una nueva familia con una nueva esposa y muchos hijos y nietos y murió feliz rodeado por todos ellos. Por eso la paciencia de Job y la fe en Dios que nunca perdió, es referente de fidelidad e integridad ante Dios.
El Tiempo
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