¿Cuál es la actual situación del PBI en Arequipa y cómo reactivar nuestra economía regional?
El producto interno bruto (PIB) es uno de los principales indicadores más utilizados por los Estados para medir la “salud” de su economía interna ya que representa el valor total de todos los bienes y servicios producidos en un período de tiempo específico; que generalmente se efectúan cada trimestre. Medir el PBI es un poco complicado y el cálculo puede hacerse mediante la suma de todo lo ganado en un año (desde el punto de vista del ingreso), o por la suma de lo que a cada uno gastó (método del gasto). Por lo tanto, la producción y el crecimiento económico tiene un gran impacto en los Estados. En forma reciente el INEI dio a conocer que el PBI del Perú en el segundo trimestre 2020 registró una contracción de -30.2% por la disminución de la demanda interna en – 27.7% y el comportamiento negativo de nuestras exportaciones en – 40.3%, lo que nos obligará a replantear las medidas para reactivar la economía nacional y regional.
Sobre el tema en debate, dialogamos varios actores de Arequipa. La Directora del Instituto Nacional de Estadística e Informática de Arequipa, Lic. Silvia Pacheco, nos informó que la participación del Valor Agregado a precios constantes de la Región Arequipa en el Producto Bruto Interno Anual Nacional en los últimos tres años, tuvo una disminución permanente de 6.0%, ya que en el 2017 bajó a 5,9% y en el 2018 continuó esta tendencia a 5,8%. Pero en el año 2019, el PBI del Departamento de Arequipa también decreció en -0,2%, pero remarcó que, en los últimos doce años entre 2007 y 2019, el PBI de Arequipa creció a una tasa de crecimiento promedio anual de 5,3%. En el año 2019, Arequipa participó con el 5,8% del PBI del país y su PBI per cápita a precios corrientes, fue de 27 mil 555 soles y se ubicó por encima del promedio del país que fue de 23 mil 561 soles.
La funcionaria regional remarcó que, en el 2019, la economía arequipeña decreció -0,2% como resultado de la contracción de la actividad agropecuaria en -1,9% y la Extracción de Petróleo, Gas y Minerales en -4,7%, pero también crecieron las actividades Pesca y Acuicultura en 19,4%; Administración Pública y Defensa (6,5%); Telecomunicaciones y Otros servicios de información (6,4%), Manufactura (1,4%), entre otras; que no pudieron compensar la caída de las actividades primarias agrícolas y de minería. Agregó que, en el 2019, se contrajo la producción de cobre (-4,5%) asociada a la Sociedad Minera Cerro Verde S.A.A.; Oro (-13,8%) y plata (-48,4%), vinculadas a la Compañía de Minas Buenaventura S.A.A. que perjudicó la economía regional, ya que la agricultura disminuyó -1,9%.
La Jefa Regional del INEI manifestó que su institución publicó los resultados del PBI correspondiente al II trimestre del 2020 donde el Producto Bruto Interno (PBI) se redujo en 30,2% como consecuencia de las medidas adoptadas por el gobierno, destinadas a afrontar la COVID-19. La demanda interna se contrajo en -27,7% por la reducción de sus componentes: gasto de consumo de las familias (-22,1%), gasto de consumo del gobierno (-3,2%) e inversión bruta fija (-57,7%), pero también las exportaciones e importaciones disminuyeron en -40,3% y -31,3%, respectivamente.
Silvia Pacheco, refirió que su institución efectúa Estadísticas, esto es, cuantifica lo que pasó en la historia de los hechos susceptibles de obtener información, pero la función del INEI no es hacer pronósticos de lo que pasará en el futuro. Sin embargo, precisó que, la reactivación de la economía regional será un reto y estará sujeto en primera instancia a las decisiones de política económica nacional y de la iniciativa de las empresas a nivel regional, por lo que será indispensable que las empresas, grandes medianas o pequeñas, reformulen cómo brindarán sus servicios debido a que el mercado se viene adaptando a una nueva realidad donde predomina el uso de plataformas virtuales
Uno de esos retos, será mejorar el ingreso de los hogares, que, según la ENAHO, el ingreso de los trabajadores dependientes e independientes cayó en -56,7% que fue atenuado por el pago de los bonos otorgados por el Gobierno. Por lo tanto, la reactivación de la economía regional no podrá obviar la estructura del Valor Agregado Bruto de Arequipa donde se aprecia que, si priorizamos las actividades de Extracción de Petróleo Gas y Minerales con la Manufactura y otras actividades, bordean el 85,1% del Valor Agregado regional de Arequipa, por lo que es urgente trabajar dando prioridad a estas actividades.
Actividades | Estructura% 2/ |
Total Valor Agregado Bruto | 100,0 |
Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura | 7,6 |
Extracción de Petróleo, Gas y Minerales | 26,7 |
Manufactura | 19,4 |
Construcción | 4,7 |
Administración Pública y Defensa | 2,6 |
Otras Actividades 3/ | 39,0 |
Otro aspecto que manifestó la Jefa Regional del INEI, es que las características económicas y sociales de la población arequipeña deben ser un factor determinante ya que nuestra población menor de 15 años disminuyó de 26,4% en el censo del 2007 a 23,7% en el 2017 y la población de 15 a 64 años, constituye la fuerza potencial de trabajo regional que aumentó de 66,2% en los censos nacionales de población y vivienda del 2007 a 67,5% en el 2017, pero también creció la población adulta mayor de 7,14% en el 2007 a 8,8% en el 2017.
El Portal Digital Arequipa Misti Press, consultó con algunos economistas arequipeños a quienes requirió sus propuestas para reactivar nuestra economía regional y evitar nuestro colapso socio económico de Arequipa. El Profesor Principal de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional de San Agustín, Dr. Glenn Arce Larrea, recordó que, en el año 2016, Cerro Verde inauguró su planta procesadora con una inversión de 5,600 millones de dólares, originando para nuestra región un crecimiento que sobrepaso hasta 4 veces lo que lo hizo nuestro país. Esta inversión fue récord en el crecimiento por el impacto en los demás sectores de la economía desde que iniciara el proceso de inversión.
Pero el 2020, las noticias no son buenas, por un lado, venimos con una economía nacional que fue castigada por los bajos niveles de confianza lo que determinó que la inversión se contrajera y por el otro, la pandemia a nivel económico redujo drásticamente la oferta y la demanda. Adicionalmente, debemos sumarle los efectos de los conflictos comerciales entre EEUU y la China y ahora la incertidumbre que genera las elecciones en EEUU. Todos estos escenarios han generado una incertidumbre bastante fuerte que nos están haciendo pensar que la economía nacional siendo optimista, el PBI se contraerá en 12% y en un pesimista podría llegar a disminuir un 20%.
En tal sentido, la región Arequipa su decrecimiento estaría en un rango similar con un margen de error del +-2%. Arce Larrea agregó que los sectores de turismo y construcción serán los más afectados, ya que ambos existen un porcentaje bastante alto de informales. Por otro lado, remarcó que su hipótesis es que muchas empresas de la región ya llegaron a un finacial distress que definitivamente los ha conducido a la quiebra. En otras palabras, la cadena de pagos ya se rompió a pesar de las medidas que se dieron y la fuerte caída del empleo ha ocasionado que los ingresos de las empresas se hayan contraído fuertemente y como consecuencia los condujo a no cumplir con sus obligaciones.
Respecto a la Inversión pública, afirmó que está es necesaria y para ello deben destrabarse el Proyecto Majes y tienen que ser eficientes y eficaces en su ejecución, pero el gobernador debe dar señales de ser un verdadero líder de la región para recuperar los niveles de confianza que había en nuestra región, ya que su inacción nos ha perjudicado y nos seguirá perjudicando. Por su parte, el Decano del Colegio de Economistas de Arequipa, Dr. Oswaldo Zeballos, señaló que la economía de la región Arequipa históricamente contribuyó con el 5.2% a la conformación del Producto Bruto Interno del País, donde los sectores de mayor dinamismo fueron las actividades como la Minería, Agricultura, Pesca, Manufactura y servicios.
Es a partir, del 15 de marzo de 2020 que todos los indicadores que explican el comportamiento de la economía nacional y específicamente de la Región Arequipa, cambió drásticamente por la pandemia sanitaria e ingresamos a un proceso de guerra frente a un enemigo altamente desconocido y que involucra a la sociedad mundializada. Esto ha obligado a la reestructuración del comportamiento de los principales mercados del mundo, como por ejemplo realizar una producción para abastecer el mercado interno priorizando la alimentación de la sociedad.
Zeballos indicó que, de acuerdo a las cuentas nacionales publicadas por el INEI, el cuarto trimestre del año 2019 el PBI nacional registró la cifra de 141 054 millones de soles de 2007, mientras que para el primer trimestre de 2020 registro el monto de 125 604 millones de soles. Esta situación indicaba que la economía peruana experimentó un descenso del 11.0 %, lo cual permitía prever que este descenso del PBI no era sino el inicio de una gran crisis de la economía peruana y por lo tanto habría que diseñar políticas para encausar adecuadamente una economía de guerra.
Remarcó que el INEI publicó las cuentas nacionales del país correspondientes al segundo trimestre del presente año, donde se ha obtenido un PBI de 96 935 millones de soles a precios de 2007, es decir en términos reales. Pero si se realiza el mismo análisis se puede afirmar que la economía nacional registró una caída del PBI del orden de -22.8 % en relación al primer trimestre del presente año y del orden de -30.2 % con relación al segundo trimestre del año 2019, lo que es preocupante para la economía nacional.
Con relación al comportamiento de la economía de la región Arequipa, el economista Zeballos, en primer lugar, refirió que los sectores importantes como el agropecuario, la industria alimentaria, la pesca, el transporte de alimentos, hidrocarburos, entre otros; servicios como banca y seguros, telecomunicaciones, funcionaron sin mayor problema. Pero la minería especialmente la gran minería, industria altamente tecnificada y otras actividades, fueron afectadas medianamente, por lo que podríamos indicar que el PBI de la Región Arequipa podría estar contribuyendo con un 3.0 % en la conformación del PBI nacional. Esto se puede sustentar en la reactivación dela principal economía mundial ligada a la peruana como es China y Estados Unidos, mientras que existirán sectores muy afectados y que su recuperación será muy lenta como son el turismo y todo el sector ligado a la culinaria.
Por su parte, el economista, Dr. Jorge Lira Torres, ex decano del Colegio de Economistas, expresó que en inversiones públicas, el gobierno regional y los municipios provinciales deben contar con un calendario anual de inversiones con expedientes técnicos concluidos para solicitar al gobierno nacional recursos económicos para ejecutar dichos proyectos en el próximo año, priorizando los proyectos que sean una locomotora que impulsen el desarrollo regional, los que generalmente no están listos por falta de capacitación a los funcionarios públicos, pero también el gobierno regional debería crear condiciones básicas en servicios públicos para que los inversionistas privados puedan construir parques industriales necesarios en Arequipa que permitiría el crecimiento del PBI regional en los próximos años y no seguir improvisando desde la gestión pública como se aprecia en los últimos años.
Respecto a las inversiones privadas, afirmó que el proceso es casi igual, pero con menos restricciones y con mayor capacidad financiera cuyos proyectos deben contar con estudios de factibilidad para ver si es rentable su inversión los que podrían generar empleos, tributos y desarrollo socioeconómico. Lira Torres, mencionó que Arequipa tienen varios recursos naturales que se deben explotar racionalmente, pero enfatizó que no se está aprovechando de los recursos humanos para generar riqueza e incrementar el crecimiento económico regional, ya que tenemos un potencial humano profesional que no está liderando el desarrollo regional ya que no se les capacita en gestión pública, pero también tenemos una población parcialmente indisciplinada que ha perdido respeto a la autoridad gubernamental, siendo muy tolerantes ante la corrupción que es un cáncer que avanzó en la sociedad peruana en las últimas décadas, lo que debe cambiarse con un mayor impulso a los valores y la ética en el Estado.