En setiembre del 2019, se publicó el Informe Anual sobre preparación mundial para las emergencias sanitarias denominado “Un Mundo en Peligro” que efectuó la Junta de Vigilancia Mundial de Preparación que organizaron meses atrás el Director General de la Organización Mundial de la Salud y el Presidente del Grupo del Banco Mundial. La Junta fue integrada por 15 miembros todos ellos expertos en salud pública encabezada por la Dra. Gro  Harlem Brundtland, ex primera ministra de Noruega y ex directora de la OMS, siendo sus objetivos, evaluar la capacidad del mundo para protegerse ante emergencias sanitarias, determinar deficiencias criticas y promover actividades de preparación nacional e internacional. La Junta seleccionó 7 medidas algunas de las cuales debían aplicarse en forma inmediata el 2019 y otras a largo plazo, estableciendo indicadores de cumplimiento.

El informe da cuenta que entre el 2011 al 2018, la OMS realizó un seguimiento de 1,483 brotes epidémicos en 73 países como el síndrome respiratorio agudo severo (SARS) el síndrome respiratorio de Oriente Medio (SARS), el ebola, el zika, la peste o fiebre amarilla, reseñando que  los pobres son los que más sufren, generando perdidas de miles de billones de dólares en diversos países del mundo. El informe refiere que las epidemias y pandemias generan trastornos para el comercio mundial de mercancías, el turismo, y otros servicios complementarios. Da cuenta que la pandemia mundial de la gripe el año 1918 afectó a más de 50 millones de personas, y si se produjera el 2019 una pandemia mundial donde se puede viajar a cualquier parte del mundo en menos de 36 horas, podría causarse la muerte entre 50 a 80 millones de personas, lo que podría causar pánico, desestabilizar las economías nacionales y tener graves consecuencias para la economía y comercio mundial.

Asimismo, da cuenta que todos los países han aprobado el Reglamento Sanitario Internacional el 2005 de carácter vinculante que exige que los gobiernos detecten, evalúen y notifiquen amenazas a la salud y responder a ellas, debiendo notificar a la OMS sobre emergencias de salud públicas para adoptar las medidas necesarias. El informe publicado en setiembre del 2019, resume las dificultades y obstáculos que aún existían en el mundo. Entre ellas, la falta de liderazgo a nivel nacional ya que los gobernantes no destinan energías y recursos para evitar los brotes y al 2018 solo un tercio de países del mundo contaban con capacidades requeridas del reglamento sanitario internacional, pero la mayoría de naciones serian incapaces de hacer frente a pacientes infectados con un patógeno respiratorio provocando una elevada mortandad y los países más importantes del mundo pese haberse comprometido con la salud, 76 países no han cumplido con sus obligaciones asumidas.

Por ser de interés público, resumimos el informe de 48 páginas “Un Mundo en Peligro” de la OMS publicado en setiembre 2019, que recomendó las medidas a adoptar a los gobernantes de los países, las que literalmente no son copiadas con exactitud en toda su extensión por razones de espacio, pero que es necesario compartirlos con ustedes, para que juzguen si los gobiernos del mundo cumplieron o no con sus obligaciones.

Estas fueron las siete medidas urgentes para preparar al mundo ante las emergencias sanitarias, pero también los indicadores de seguimiento que debían cumplir los gobernantes:

1.- Los jefes de gobierno deben comprometerse a dedicar una partida prioritaria de recursos y gastos ordinarios a la preparación de la cobertura sanitaria universal. El indicador de progreso para setiembre 2020, es que deben evaluar sus capacidades al 01 de julio del 2019 elaborando un plan de acción nacional sobre seguridad sanitaria, determinando los recursos necesarios y comenzar aplicar el plan.

2.- Los países y organizaciones regionales deben dar ejemplo cumpliendo compromisos políticos y financieros adquiridos con respecto a la preparación y supervisar los progresos anualmente. El indicador de progreso a setiembre 2020, es que los países que integran el G7, G20 y G77 deben supervisar los compromisos adquiridos con respecto a la preparación de emergencias sanitarias.

3.- Los países deben construir sistemas sólidos y los jefes de gobierno deben designar un coordinador nacional de alto nivel y responsabilidad política para poner en marcha una preparación eficaz y mantenerla. Un indicador a setiembre 2020 es que la OMS y el Banco Mundial y los países presupuestan financiamiento para emergencias de salud pública.

4.- Los países e instituciones deben prepararse para lo peor ya que la propagación de una pandemia letal obliga a garantizar inversiones suficientes para el desarrollo de vacunas y tratamientos innovadores. Los indicadores a setiembre 2020 comprometen a los países y donantes a establecer plazos para la financiación y desarrollo de una vacuna universal contra la gripe debiendo elaborar un plan para fortalecer la capacidad de innovación y desarrollo antes y durante la epidemia.

5.- El FMI y Banco Mundial deben preparar y  planificar riesgos económicos para mitigar las consecuencias de la pandemia. Los indicadores a setiembre 2020 es que el FMI y el Banco Mundial deben integrar la en sus evaluaciones sistemáticas de los riesgos políticos e institucionales para otorgar créditos y donaciones en casos de emergencia sanitaria.

6.- Las instituciones  internacionales de financiamiento y donantes deben incrementar la financiación para países pobres y vulnerables a través de asistencia para el desarrollo destinado a la salud al Fondo Central de las Naciones Unidas y los Estados deben acordar un incremento en sus contribuciones a la OMS para financiar la preparación y actividades de respuesta para emergencias. El indicador a setiembre 2020 es que los Estados miembros de la OMS acuerdan en la 73 Asamblea Mundial de la Salud en el 2020 aumentar sus contribuciones destinadas a la preparación para el Fondo de Contingencias para emergencias hasta de 100 millones de dólares.

7.- La ONU y la OMS deben fortalecer la coordinación con diversos países y emergencia sanitaria asignando funciones y responsabilidades poniendo en marcha rápidamente estrategias de preparación y respuesta ante las emergencias sanitarias en las primeras fases de un brote antes de la declaratoria de una emergencia de salud pública. Los indicadores de gestión a setiembre 2020 es que el Secretario General de la ONU y el Director General de la OMS reforzaran la coordinación y responsabilidades en casos de emergencia sanitaria en diferentes países llevando a cabo la simulación de todo el sistema sobre la liberación deliberada de un patógeno respiratorio letal y el Secretario General de la ONU convocará a un dialogo de alto nivel con los responsables de salud, seguridad y asuntos exteriores para determinar la forma de actuar frente a la pandemia.

A seis meses de estas recomendaciones de la OMS  a los Estados, organismos multilaterales y los gobernantes del mundo, no podemos ignorar algunas preguntas.

¿Cuánto dinero presupuestó el gobierno de Vizcarra desde setiembre 2019 para preparar la cobertura sanitaria en nuestro país al ser alertados por la OMS? ¿El Congreso no debería citar al primer ministro y ministro de salud para que responda estas preguntas? ¿Designó el gobierno de Vizcarra a un Coordinador Nacional de Alto Nivel para que prepare un plan nacional contra la pandemia que alerto la OMS desde setiembre 2019? ¿Cuánto presupuestó el gobierno nacional para financiar una vacuna universal contra la pandemia el año 2019? ¿Cuánto presupuestaron el FMI y el BM para mitigar la pandemia que hoy padecen millones de personas en el mundo? ¿Cuántos Estados incrementaron su contribución económica a la OMS para atender las emergencias sanitarias? ¿Coordinó la ONU y la OMS planes de emergencia sanitaria con los países en los últimos meses desde setiembre del 2019? El gobierno de Vizcarra le debe explicaciones al país y saque usted sus conclusiones si los gobernantes del mundo actuaron o ignoraron las advertencias de la OMS.