Paz en América del Sur

Este artículo de opinión se sustenta en la Historia fratricida que ha sufrido el Perú en sendos conflictos armados. Su fin es promover la paz continental en América Sur. Las declaraciones de Gustavo Preto, presidente de Colombia, y su Ministro de Defensa, obedecen a un plan subversivo del terrorismo internacional, para favorecer a las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) en la extracción del oro en la frontera, y al narcotráfico, usando la misma táctica ecuatoriana, de invertir en la minería ilegal ciudadanos ecuatorianos y ahora colombianos en la Selva Amazónica peruana.
Apoyados por las Fuerzas Armadas Colombianas, y como es conocido, ya habiendo incursionado en la frontera las Fuerzas Armadas Ecuatorianas con mil quinientos hombres. Estas inversiones son en la minería ilegal. Es extraño que se ponga en tela de juicio el Tratado de Río de Janeiro (1947) y el Tratado Salomón-Lozano (1922).
Estas tácticas subversivas pueden ocasionar una guerra o una conflagración internacional en América Sur, en la que intervendrían por el Norte, Colombia y Ecuador, sin duda Venezuela que ha infiltrado a sus inmigrantes hace años en el Estado Peruano.
Por el Sur Bolivia que pretende anexarse Puno y etnias aymaras, tener una salida al mar por Ilo, puesto que Alberto Fujimori, otorgó en su gobierno un enclave militar para la Armada Boliviana y una franja de la costa llamada «Bolivia Mar» otorgados por un centenar de años.
Además, siguiendo la geopolítica de Pinochet, Chile pretende ahora la costa y territorio frente a sus doscientas millas, que abarcan hasta Arequipa, que ganó en el juicio de la Corte Internacional de Justicia de la Haya, por la mala defensa que confina al Perú. A esto se agrega, que todos estos países, incluido Brasil, son izquierdistas y/o tienen problemas internos.
Esta es la realidad peruana frente a sus vecinos americanos. En sus conflictos armados siempre han mutilado y usurpado el territorio peruano.
Javier Azalgará Neira – Abogado