El gobernador regional de Arequipa, Rohel Sánchez, mediante Resolución Ejecutiva Regional 562-2023 de fecha 13 de noviembre, designó en forma sorpresiva a partir del 14 de noviembre al Ing. Jaime Armando Villa Casapino en el cargo de confianza de gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos del Gobierno Regional de Arequipa, nivel remunerativo F5.

En la misma norma legal, Sánchez, dio por concluida la designación a partir del 13 de noviembre del Ing. Juan Normando Zevallos Alvarado, en el cargo de gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos del GRA. En los hechos, Zevallos Alvarado duró en dicho cargo solo 23 días.

Lo sorpresivo es que Sánchez, el 20 de octubre del 2023, mediante Resolucion Ejecutiva Regional 528-2023, designó al Ing. Juan Normando Zevallos Alvarado, como nuevo gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos del GRA, quien reemplazó al Ing. José Miguel Montaño Enríquez, quien fue designado mediante Resolución Ejecutiva Regional 318-2023 del 23 de junio del 2023.

En los hechos, el nuevo gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos del GRA, Jaime Villa designado en forma reciente, viene a ser el cuarto gerente de dicho sector en apenas once meses de gestión voluble, inestable e impredecible de Sánchez.

El primer gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos fue el Ing. Isaías Charaja Montaño, quien fue designado el 01 de enero del 2023 mediante Resolucion Ejecutiva Regional 007-2023 por el gobernador regional.

Comentario del tema

Con la nueva designación del gerente regional de supervisión y liquidación de proyectos del GRA, el gobierno de Sánchez, llegó a efectuar por lo menos medio centenar de remociones en las catorce gerencias sectoriales que tiene la administración regional en apenas once meses de gestión, algo que nunca he visto en todas las administraciones regionales desde 1990, no incluyendo los continuos cambios de sub gerencias y jefaturas de oficinas regionales.

La designación de gerentes sectoriales es una competencia exclusiva que la ley orgánica de gobiernos regionales le reconoce al gobernador regional, pero ese derecho está sometido al marco legal que regula el cumplimiento previo de requisitos básicos denominada “meritocracia” a los funcionarios de confianza.

¿Es muy exigente Sánchez y exige resultados en poco tiempo a sus gerentes?, ¿Designó gerentes sin comprobar que cumplían requisitos legales y por eso retrocedió y los cambio? ¿El gobernador detectó actos ilícitos o inmorales en sus gerentes y se vio obligados a quitarles la confianza antes que estalle el escándalo en la prensa? ¿Designa el gobernador a gerentes y los coacciona directa o indirectamente para ubicar en dichas gerencias a sus recomendados y si no acatan sus disposiciones les quita la confianza?

¿Puede un gerente regional trazar con seriedad un plan de trabajo anual o bianual como mínimo si sabe que en cualquier momento lo van a remover de su cargo? ¿Sánchez no está atentando contra la institucionalidad del GRA que él deberia ser el primero en sostenerla? ¿Por qué el silencio y secretismo de Sánchez ante tantos cambios cuando es su deber por transparencia y honestidad explicar a la opinión pública las razones de las remociones de tantos gerentes? ¿Es muy inestable, voluble y desconfiado el gobernador para estar inconforme con los gerentes que el mismo designa?

¿Sánchez creé que estamos en la época medioeval y el Estado es él y no tiene la obligación de rendirle cuentas a nadie y menos al Consejo Regional que los que los consideraría como sus vasallos? ¿El Movimiento Regional “Yo Arequipa” tiene cuadros profesionales calificados para las gerencias y jefaturas en el gobierno regional o es un club politico de improvisados que como “lotería” se sacaron el premio mayor y ahora entregan gerencias a cualquier parroquiano en el GRA?

¿Los continuos cambios gerenciales no deberia obligar al Consejo Regional a citar al gobernador Sánchez en su ejercicio de fiscalización y control politico para que explique en detalle y en forma documentada cuales son las razones que en once meses de gestión haya cincuenta gerentes sectoriales? ¿No está Sánchez pasando de la discrecionalidad que le otorga la ley para designar a funcionarios a la arbitrariedad de hacer lo que le da la gana y sin tener que rendirle cuentas a nadie?

¿Si en once meses de gestión regional designó a cincuenta gerentes, llegará en sus cuatro años a los doscientos gerentes regionales hasta el año 2026 marcando un nuevo record mundial? ¿Hemos elegido los arequipeños a una persona que se considera un “Rey” y que no rinde cuentas a nadie de sus actos en la remoción de los gerentes o un demócrata que tiene que ser transparente y honesto con el electorado que le dio su confianza en las elecciones regionales 2022? ¿Sirve de algo el Consejo Regional o los consejeros son simples “monaguillos” del “cura” regional que no ejercen su función de fiscalización y control politico?

En resumen, Sánchez parece que no se ubica en el espacio tiempo histórico como decía Haya de la Torre. El gobernador creé que estamos en el siglo XVI donde en Francia gobernaba el Rey Luis XIV y dirigía una monarquía absoluta, que imponía impuestos a su poblacion pobre para financiar los excesivos gastos de la nobleza lo que años después generó la rebelión del pueblo francés, acabando con la tiranía con la histórica Revolución Francesa. Luis XIV, se creía “divino, omnipotente y predestinado” e hizo famosa la frase: “El Estado soy yo”, cuando un sector del parlamento francés se oponía a la imposición de nuevos impuestos contra el pueblo, dejando entrever dicho monarca la primacía de la autoridad real qué el representaba.

Sin embargo, estamos en el siglo XXI, donde no hay monarquía absoluta, ni reyes y ha desaparecido el absolutismo y es el Estado quien ha reemplazado a los reyes, emperadores y monarcas y es el pueblo quien elige democráticamente a sus autoridades en sus diversos niveles de gobierno, quienes tienen derechos, pero también deberes ante la sociedad, establecidos en sus Constituciones Políticas.

Entre ellos, la transparencia y la rendición de cuentas de sus actos en las permanentes designaciones de gerentes sectoriales, que no está haciendo el inquilino transitorio del gobierno regional de Arequipa y se asemeja a otro caudillo más que creé que la sede regional es su feudo y hacienda personal ante el silencio y complicidad del Consejo Regional que no está haciendo respetar sus fueros establecidos en la ley orgánica de gobiernos regionales, ni en su reglamento interno que tiene categoría de ley regional.

Hugo Amanque Chaiña – Periodista y Abogado