San Agustín de Hipona: Patrono de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa

Pocos católicos y agustinos conocen la trayectoria que tuvo San Agustin de Hipona. Sus nombres fueron, Aurelio Agustín, nació en el pueblo de Tagaste, (África) el 13 de noviembre del año 354 y de padres modestos que se esforzaron por darle una buena educación. Sin embargo, a los 15 años comienzan sus problemas adolescenciales cuando es enviado a Cartago y se interesa excesivamente por las mujeres, llevando una vida lujuriosa, pero también se interesa por el teatro. A los 17 años tiene su primer hijo Adeodato, lo que lo obliga a convertirse en docente y estabilizar económicamente a su nueva familia. Enseña Gramática desde los 19 años causando mucho respeto entre los viejos docentes.
La muerte de su Padre, Patricio, le causo un profundo dolor, mientras que su Madre Mónica le inculca que se convierta al cristianismo y se aleje totalmente del mal camino y amistades lujuriosas que aún mantenía. Aurelio Agustín desde muy joven logra destacar como un buen maniqueo, (persona que pertenece a una secta religiosa). Escribe a los 26 años su primer libro, “De Pulcro Et Apto”, para posteriormente aperturar una Escuela y mejorar sus ingresos económicos. Viaja a Roma el año 383 y posteriormente a Milán al ganar por oposición una cátedra
de Retórica.
En esa ciudad llega a interesarse por el prestigio y fama del Obispo Ambrosio y por su fama de orador, quien va derribando los mitos del maniqueísmo y arrasa los pensamientos juveniles de Aurelio Agustín. Lee intensamente la Biblia y piensa en la conversión. Ya cuenta con 32 años y se retira de la cátedra y comienza a escribir su libro, “Confesiones “, donde relata sus confusiones y se apresta a ser bautizado por el Obispo Ambrosio. Cuando decide volver a su patria, fallece su Madre Mónica, a quien evoca con cariño y amor, ya que en forma permanente le pedía y suplicaba su conversión.
Visita varios Monasterios y al regresar finalmente a su tierra natal, reparte su herencia entre los más necesitados y funda un Monasterio con algunos de sus amigos. Por sus virtudes intelectuales, pasa a ser consejero de su pueblo y recibe múltiples cartas desde Italia, España y África con el mismo propósito. Comienza a predicar y administrar sacramentos y el Obispo Valerio lo consagra como Obispo Auxiliar de Hipona para evitar que a Aurelio Agustín se lo lleven a otro pueblo, pero
posteriormente es convertido a Obispo a los 42 años. Por la confianza y simpatía que generó en la población, fue nombrado juez por un tiempo en su pueblo.
Luego, observa con alegría y pena a la vez, que sus mejores monjes como Alipio, Evodio, Posidio Bonifacio, se los llevan a otros obispados de ciudades africanas. Viaja y luego escribe el año 400 otro libro, “El Tratado sobre la Trinidad” y posteriormente, “Ciudad de Dios”. Pero
es a la edad de 76 años cuando Gensericó rodea a la ciudad de Hipona y Aurelio Agustín, deja sus libros y discusiones para dedicarse íntegramente al mundo cristiano y a la Paz de Dios. El 28 de agosto del año 430 a la edad de 76 años, fallece Aurelio Agustín y rodeado de sus amigos a quienes les invoca que sigan su ejemplo de conversión a quienes transitan por juventudes escabrosas y lujuriosas.
Fue catedrático, filosofo, doctor y un brillante pensador de la antigüedad cristiana. Afirmó que quien en Cristo creé, también creé en la eternidad, en la muerte, pero también en la inmortalidad del alma. En honor a ese gran Santo de la Iglesia Católica, es que la Universidad Nacional de San Agustín lleva su nombre y es el Patrono de la Universidad desde su creación en 1828, ya que lo considera como su guía espiritual e intelectual de la principal casa superior de estudios de Arequipa. El Rector de la UNSA, Dr. Hugo Rojas Flores, en representación de toda la comunidad universitaria, encabezará los festejos del Patrono San Agustín de Hipona el próximo lunes 28 de agosto, con una misa, procesión y acto solemne en los claustros agustinos.
Hugo Amanque Chaiña – Periodista y Abogado