Congresista Martínez: Quien siembra vientos, cosecha tempestades

pressadminmarzo 22, 202313min0
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Congresista Martínez: Quien siembra vientos, cosecha tempestades

edwin intolernte

A mediados del mes de enero 2023, al caminar por la Calle Mercaderes de Arequipa, me encontré con un colega abogado que estaba molesto y furioso contra los congresistas que defendían al gobierno de Boluarte y sus ministros luego de la masacre donde ya habían perdido la vida más de medio centenar de personas en el interior del país que se habían movilizado. Tuvimos entonces un breve dialogo en estos términos: ¿Ha visto usted Dr. Hugo en la televisión como los congresistas limeños defienden a la usurpadora Boluarte? ¿Ha escuchado usted las expresiones del impresentable Edwin Martínez señalando que los peruanos que salimos a protestar a las calles hemos sido azuzados por los rojos y somos violentistas? ¿No ha visto usted que Martínez afirmó en su intervención en el Congreso que debe defenderse a los policías y militares que defienden a la democracia y nos ha calificado a los ciudadanos que nos movilizamos en las calles como rojos y caviares?

Le conteste de inmediato que, sí habia visto ese debate en la televisión y estaba indignado como ciudadano, ya que esos congresistas de la derecha y extrema derecha en su mayoría limeños que no salen de la capital, no cumplían con su responsabilidad política de censurar a los ministros por la muerte de tantos peruanos y cuestioné que Martínez haya tenido esas expresiones desafortunadas e intolerantes a sus compatriotas. Mi colega abogado me preguntó entonces lo siguiente. ¿Qué haría usted Dr. Hugo si en estos momentos lo tiene frente a usted al congresista Martínez? Le conteste que le expresaría a Martínez que no me siento representado por él como arequipeño, que no tiene alma ni solidaridad por los familiares de los muertos y que deberia pedir disculpas por sus expresiones vertidas en el debate parlamentario ya que no todos los ciudadanos que salieron a las calles a protestar contra Boluarte no son borregos y solo ejercían su derecho a la protesta.

Le pregunte entonces de inmediato a mi colega abogado lo siguiente: ¿Qué haría usted colega si lo tiene al frente al congresista Martínez? Su respuesta me sorprendió y me dijo textualmente: “Yo le escupiría en la cara para demostrarle de frente mi repudio a sus expresiones ofensivas a nuestros compatriotas que se han movilizado voluntariamente y han sido asesinados y que no hemos sido azuzados ni somos violentistas”. Obviamente, le exprese a mi colega, mi oposición a esa supuesta conducta, viniendo de un profesional y que esas expresiones también muestran intolerancia, pero comprendía su impotencia ante los agravios de los congresistas conservadores del parlamento como Martínez, que abusan de la tribuna parlamentaria y de inmunidad que les reconoce la Constitución. Ese pequeño dialogo con un profesional del Derecho, evidencia cuanto ha calado en la población el rechazo a los congresistas extremistas como Martínez, por parte de los peruanos que viven en el interior del país. Es decir, el rechazo a las expresiones de los legisladores, arrastran inevitablemente a la institución parlamentaria y su imagen que todos deberíamos respetar como primer poder del Estado.

Desde 1980 hasta hoy 2023, como periodista, nunca he visto que algun arequipeño o manifestantes mistianos, hayan insultado con palabras soeces y agredido directamente a nuestros congresistas de todas las bancadas políticas que nos representaron en el parlamento nacional desde hace cuatro décadas. Martínez, con sus expresiones beligerantes e intolerantes, ha roto ese esquema de respeto mutuo entre congresistas y ciudadanos. El congresista populista en menos de una semana, ha recibido insultos en Arequipa de gente que se ha sentido ofendida, maltratada y vejada por sus expresiones en el hemiciclo parlamentario y ha reaccionado como un escolar.  Ha saltado a las primeras planas con un lenguaje impropio de un padre de la patria, cuando en realidad deberia resaltar por su producción legislativa y de fiscalización. En vez de hacer un mea culpa y reflexionar sobre su conducta y expresiones vejatorias, ha confirmado su intolerancia antidemocrática.

El congresista de Acción Popular que no es analfabeto, ni tiene enfermedades mentales, ha incumplido sus obligaciones como padre de la patria reguladas en el Código de Ética Parlamentaria. Dicho Código en el artículo 2, refiere cuáles son sus deberes y principios que debe respetar en el ejercicio de su funcion: “El Congresista realiza su labor conforme a los principios de independencia, transparencia, honradez, veracidad, respeto, tolerancia, responsabilidad, democracia, bien común, integridad, objetividad y justicia. El principio de la independencia debe entenderse dentro de la lealtad al grupo político a que pertenezca”. ¿Sera sometido Martínez a la Comisión de Ética?

Recordemos que el ex presidente Fernando Belaunde como fundador de Acción Popular, en la década del cincuenta del siglo XX, también fue criticado e insultado por sus ideas renovadoras de la política peruana, pero jamás se le escuchó un agravio, insulto o mensaje de odio a sus opositores. Combatía sus ideas con sus rivales políticos, pero nunca llegó a la ofensa personal ni colectiva. Belaunde efectuó una protesta pública en Lima y recibió el famoso “manguerazo” de la policía que trataba de impedir su movilización por la capital para exigir que a su partido politico se le inscriba para participar en elecciones políticas, lo que aprovechó para ganar notoriedad nacional y política y presentarse como una nueva alternativa ante los electores. Belaunde era un arquitecto, catedrático y un caballero a carta cabal. Ningún punto de comparación con Edwin Martínez.

Con seguridad, en las próximas elecciones, el partido Acción Popular, será barrido del mapa electoral como lo han sido el PPC y el Partido Aprista por apoyar desde el parlamento nacional leyes en favor de los empresarios y grupos de poder económico y no cautelar los intereses nacionales del país. La ex presidenta del Congreso, Maria Alva, Edwin Martínez y los “niños” populistas”, serán la “factura” que deberán pagar los populistas ante el electorado que no les perdonará su posición conservadora.

Tengo la impresión personal que Martínez tiene una precaria formación política e ideologica según las expresiones que ha vertido en los últimos meses en el parlamento y en los medios de comunicación donde lo tratan con guantes de seda. Para el congresista populista, el Perú está dividido entre “demócratas” y “chavistas” o entre “comunistas” y “capitalistas. Para él, no habria punto intermedio. No entiende sobre análisis socio politico. Le hace falta escuchar a los antropólogos y los sociólogos para entender la multiplicidad de culturas y las clases sociales, pero también asesorarse con los psicólogos para entender los tipos de personalidad que tienen los peruanos, así como de los periodistas para comprender el espectro socio politico, económico y social de la sociedad peruana que es heterogénea. Lima es el centro del poder politico, económico y mediático y la capital del centralismo, pero no es todo el Perú.

Justamente, las protestas y movilizaciones vienen del interior porque no se sienten representados por este parlamento ni el por el gobierno nacional, ya que el pueblo percibe que la derecha y extrema derecha parlamentaria, no cautela ni protege, nuestros intereses ni nuestros recursos naturales y hoy han perdido legitimidad. Martínez, no entiende que ningún parlamento soberano e independiente en el mundo, puede mantener a un gobierno con más de sesenta muertos, incumpliendo su deber constitucional de control politico y censura al que estan obligados por mandato constitucional.

Eso es lo que no le perdona el soberano al actual parlamento, al fomentar la impunidad desde el primer poder del Estado y blindar a Dina Boluarte y sus ministros que tarde que temprano tendrán que rendir cuentas de sus actos a la justicia nacional e internacional. El Estado nació para proteger la dignidad de la persona humana como señala el primer artículo de la Constitución y dentro del Estado, están las fuerzas armadas y policiales para proteger a la poblacion, pero no se les dio a ellos las armas para enseñarse contra la poblacion indefensa que salió a movilizarse en ejercicio de un derecho constitucional de protesta reconocido en la Carta Magna.

Finalmente, hay una frase popular que señala lo siguiente: “El que siembra vientos, cosecha tempestades”. Parece un juego de palabras, pero nos advierte sobre las consecuencias de nuestras acciones y expresiones, pero nos trae un mensaje de fondo. Dicha frase en términos sencillos, nos advierte que, si nuestras acciones o palabras (siembra) son mal intencionadas, egoístas, ofensivas o denigrantes ante una persona o colectividad, estamos “sembrando” semillas de negatividad y antipatía hacia nuestra persona y eventualmente sufriremos tarde que temprano, las consecuencias o efectos de estas acciones y “cosecharemos” malos frutos o recibiremos el doble o triple maltrato que hicimos a nuestros semejantes.

Eso no parece haberlo entendido el congresista Martínez hasta hoy, pero esperemos que lo sucedido está semana, le sirva de reflexión sincera para expresarse adecuadamente y respete las ideas ajenas y no sea intolerante como padre de la patria y represente a todas las corrientes ideológicas en el parlamento donde estan los 130 congresistas elegidos por la voluntad del soberano. Le sugeriría al congresista Martínez que pida disculpas públicas a la población que se ha sentido ofendida y maltratada por sus expresiones y sin dejar de defender sus ideas políticas, no incurra en excesos ante una poblacion muy sensible por lo que hoy pasa nuestra patria que está enfrentada abiertamente y muy polarizada.

Todos cometemos errores en nuestras vidas voluntaria e involuntariamente y tenemos la necesidad de rectificarnos como muestra de arrepentimiento sincero, más aún si es representante politico de una jurisdicción territorial como es Arequipa, que siempre fue rebelde, pero democratica a la vez por tradición histórica. Como dice el pasaje bíblico: “Que tire la primera piedra quien no ha cometido pecado”. O que tire la primera piedra quien nunca se ha equivocado. ¿Se disculpará Martínez ante el electorado?

Hugo Amanque Chaiña – Periodista y Abogado

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