¿Qué se espera del próximo alcalde provincial de Arequipa?

La fragmentación política regional y local, con tendencia a la atomización electoral, definitivamente, no le hace bien a la democracia ni a la gobernabilidad ni a la gestión municipal, la misma debe hacerse con eficiencia, transparencia, ética y participación. En el caso de Arequipa, tenemos quince candidatos/as a la Alcaldía provincial.
Al debate, realizado por un medio de comunicación radial y televisivo en el Cono Norte, asistieron trece candidatos, faltaron Víctor Hugo Rivera y Benigno Cornejo. Seis candidatos han sido y son actualmente alcaldes distritales, a los demás, no se les conoce experiencia en gestión pública. Cada postulante tuvo dos minutos para exponer una síntesis de sus propuestas, luego responder una pregunta del panel, acto seguido, preguntar a uno de los contendores y responder una interrogante de estos últimos, finalmente, tuvieron un minuto para invocar el voto de la ciudadanía.
En general, ningún candidato sobresalió de dicho debate electoral, las propuestas fueron genéricas, nadie sustentó sus planteamientos en datos estadísticos, información técnica, estudios validados, en legislación pertinente; tampoco dieron a conocer sus equipos técnicos; ninguno se refirió a la actual gestión municipal, ni indicaron que mejorarían, tampoco refirieron cómo aseguraría la continuidad de las inversiones programadas y servicios públicos locales esenciales.
Hubo anuncios no viables, por ejemplo: Dejar sin efecto el Sistema Integrado de Transporte (SIT); sin tener en cuenta los contratos de concesión, obras ejecutadas, incluso procesos judiciales. Construir diez puentes en cuatro meses, con inversión total de S/ 60 millones, a razón de S/ 6 millones cada puente; para ello se debe tener: perfiles, expedientes técnicos, presupuestos, convocar a procesos de selección (contratar a empresas ejecutoras como supervisiones de obras).
Crear rondas vecinales o urbanas; no explicó con qué normatividad, cómo estarían conformadas, cuántas personas las integrarían, cuáles serían sus funciones, cómo trabajaría con la Policía Nacional del Perú, cuerpos de Serenazgos de las municipalidades, vigilantes contratados por urbanizaciones. La próxima autoridad edil, tendrá serias dificultades difíciles de evitar que harán que la calidad de su gestión, sea inferior a la actual y anteriores. Ojalá me equivoque.
Edgardo Lajo Paredes – Abogado