Una rendición de cuentas sin la suficiente autocritica gubernamental
El Consejo de Ministros presidido por Mirtha Vásquez, vía Canal del Estado y frente a periodistas acreditados en Palacio de Gobierno, durante varios días a razón de dos ministros por día, hicieron rendición de cuentas de sus actividades, medidas y acciones realizadas el año 2021, lo cual está bien.
Transparencia a medias.
La información permanente y la rendición de cuentas periódicas, es signo evidente de transparencia, ya sabemos “A MÁS TRANSPARENCIA MENOS CORRUPCIÓN, en sentido contrario “a menos transparencia más corrupción”. Sin embargo, solo expusieron los buenos datos dejando entrever haber obtenido resultados positivos. En sus informes estuvieron ausentes, los siguientes aspectos:
1.- No dieron a conocer la línea de base en que encontraron sus ministerios, sin lo cual no es posible determinar al término del año, si hubo una buena o regular o mala gestión. 2.- No indicaron los objetivos planteados a inicio de sus gestiones, por ende, no se sabe qué porcentaje de esas metas cumplieron al término del año 2021.
3.- Tampoco respondieron a los cuestionamientos realizados por la prensa y diversas organizaciones a varias de las propuestas y acciones de sus portafolios, no despejándose las dudas. 4.- Menos hablaron en cuánto redujeron las brechas identificadas en sus sectores, por lo tanto, no se sabe si realmente se está generando bienestar en los gobernados. 5.- Asimismo, no expusieron sobre lo ejecutado de sus presupuestos correspondientes, desconociéndose la capacidad de ejecución.
6.- Otro tema ausente fue el no haber explicado el número de nuevos trabajadores y contratados ingresados desde que fueron designados ministros de Estado; dejándose la sensación de utilizar la Administración Pública como un botín de guerra. 7.- Por último, no hubo autocrítica, actuaron como que todo está bien, cómo que no se cometió ningún error, cuando no es así.
¿Nada ha cambiado? Este proceder de los más altos funcionarios del Poder Ejecutivo de rendir cuentas a medias, no abordando los temas enumerados y sin autocrítica; provoca rechazo en la ciudadanía, les hace perder credibilidad, incrementándose la desconfianza del pueblo en sus gobernantes.
Edgar Lajo Paredes – Abogado