¿Tenemos sentimiento constitucional los peruanos?

Hugo Amanque Chaiñadiciembre 28, 20218min0
Hugo Amanque Chaiñadiciembre 28, 20218min0

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¿Tenemos sentimiento constitucional los peruanos?

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Imagen>: Diario Uno

La polarización política que nos ha conducido el debate de incapacidad moral que promovió la derecha parlamentaria contra el presidente Pedro Castillo y fracasó por no lograr los 87 votos y que enfrentó al Poder Ejecutivo y Poder Legislativo en las últimas semanas, también nos enfrentó a la sociedad peruana en el año del bicentenario que está por culminar. Unos, defendiendo al presidente Castillo para que se mantenga en el gobierno y otros, al Congreso en defensa de su competencia constitucional para vacarlo de su cargo.

Este caso desnudó y confirmó nuestra fragilidad constitucional y la carencia de integridad moral de algunos políticos en nuestra patria. Hay compatriotas que no creen en la Constitución y la interpretan a su capricho y según sus conveniencias e intereses políticos e ideológicos. Es cierto que una de las características de cualquier país democrático, es la discrepancia pública y abierta y el foro donde se demuestra esta diversidad política, social y económica, es el Congreso Nacional, donde están representadas todas las “sangres” ideológicas. Pero, no se puede caer nunca en el ideologismo puro, donde los extremos creen tener la razón siempre y obviar que los legisladores representan al país y, por lo tanto, deben pensar primero en el bien común y bienestar de los peruanos antes que sus intereses políticos e ideológicos.

No estamos honrando el artículo 38 de la Constitución que refiere “que todos los peruanos tenemos que respetar, cumplir y defender la Constitución y el ordenamiento jurídico de la Nación”. En 200 años de vida republicana, hemos tenido 12 Constituciones Políticas lo que confirma nuestra fragilidad como Estado y no hemos hecho respetar la Carta Magna, llegando al extremo de saludar y felicitar golpes de estado a cargo de militares y civiles como sucedió con Alberto Fujimori el 05 de abril de 1992, que tuvo un respaldo de 82% de peruanos según las encuestas de la época.

España es uno de los Estados de Europa que evoca anualmente el día de su Constitución, ya que en la década del setenta del siglo XX después de cuatro décadas del gobierno dictatorial de Franco, en referéndum el año 1978, los españoles aprobaron su Carta Magna vigente hasta hoy. Fue el Rey Juan Carlos quien emitió el real decreto 2964 del año 1983 por el cual fijó que cada 6 de diciembre se debía realizar actos oficiales en entidades públicas y en la sociedad española.

En el Perú ni los congresistas constituyentes, ni los parlamentos, no fijaron ninguna fecha para recordar la importancia de nuestra Carta Magna, pero si aprobaron la ley del emolientero, el día del pisco, el día de la canción criolla, etc.

El jurista, Dr. Ermo Quisbert, afirmó que la Constitución Política es “la norma jurídica suprema positiva que rige la organización de un Estado, estableciendo la autoridad, forma de ejercicio de esa autoridad, los límites de los órganos públicos, definiendo los derechos y deberes fundamentales de los ciudadanos y garantizando la libertad política y civil de los individuos”.

El Dr. Javier Tajadura Tejada, indicó que el sentimiento constitucional es “la adhesión intima a las normas e instituciones fundamentales de un Estado en forma consciente porque se estiman necesarias y convenientes para la integración, mantenimiento y desarrollo de una justa convivencia social y la intensidad de ese sentimiento es un buen criterio para medir su madurez cívica y nivel de cultura política”.

Me parece que la mayoría de peruanos carece de sentimiento constitucional ya que, en los 200 años de vida republicana e independiente, nos hemos dejado arrastrar por caudillos militares y civiles al cambiar constantemente de Constituciones e incluso aplaudir y elogiar a los golpistas, destrozando la institucionalidad del Estado.

El artículo 14 de la Constitución de 1993, afirma que “la formación ética y cívica y la enseñanza de la Constitución y de los Derechos Humanos, son obligatorias en todo el proceso educativo civil o militar”, que es confirmada en la Ley General de Educación 28044, pero esa Ley no se cumple a plenitud.

Otra de las pruebas que los peruanos no tenemos sentimiento constitucional hoy, es que mientras un grupo promueve el referéndum para consultarle al país la necesidad de una nueva Constitución, otro grupo promueve otro referéndum para evitar que la Constitución de 1993 no se derogue ni modifique y se mantenga inalterable. Lo grave es que en la Comisión de Constitución se ha aprobado un proyecto de ley que obliga que todo proceso de referéndum debe pasar primero por el Congreso, olvidando los padrastros de la patria que el soberano que es el pueblo los que tienen definir su futuro y no son los asalariados parlamentarios quienes deben poner trabas y obstáculos para ejercer un derecho fundamental que la Carta Magna reconoce a los ciudadanos.

Ningún Estado democrático ha “congelado “su Constitución y estas han ido modificándose gradualmente y adecuándose a la realidad político, social y económica del mundo, por lo que lo sensato y prudente, es modificar la actual Carta Magna de 1993 y el foro más democrático y plural es el Acuerdo Nacional donde estamos representados los peruanos con los partidos políticos, gremios empresariales y sindicales, frentes regionales, iglesias, colegios profesionales, universidades, etc.

Está opinión la emitimos al recordarse el 29 de diciembre del año 2021, los 27 años de vigencia de la Constitución de 1993, que la mayoría de peruanos no recordamos ni tenemos interés en conocerla, lo que pone en evidencia nuestra falta de sentimiento constitucional, que otros Estados y sus ciudadanos valoran y reconocen e incluso se movilizan en calles y plazas públicas cuando gobernantes civiles o militares pretenden quebrar el orden constitucional y legal del país.

Concluimos recordando a Abrahán Lincoln y su famosa frase respecto a la Constitución: “El pueblo es el soberano y el amo legitimó del Congreso, de los Tribunales de Justicia y el Gobierno, no para derrocar la Constitución, sino para derrocar a los hombres que pervierten la Constitución y las leyes”.

Hugo Amanque Chaiña – Periodista y Abogado

 

 

Hugo Amanque Chaiña


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